Uva

La planta de la vid, también conocida como parra de uva, ha sido siempre sinónimo de la dieta mediterránea, ya que se comenzó a cultivar en esa región desde los albores de la civilización. Consumida a lo largo de la historia en forma de comida y bebida, la uva ha sido una gran fuente de nutrición, pegamento social y beneficios medicinales, y su popularidad continúa vigente.

Beneficios de la uva

Tanto la planta de la vid como su fruto, la uva, han sido ampliamente investigadas por la ciencia moderna, y se han realizado miles de estudios sobre los mecanismos de acción de sus compuestos. Las propiedades de la uva han probado ser útiles, principalmente, para:

• Promover la salud cardiovascular. El consumo de uva contribuye a mejorar la circulación y disminuir el riesgo de enfermedades cardiovasculares.

• Retrasar el envejecimiento. Las uvas son ricas en compuestos antioxidantes, los cuales prolongan la vida de las células, demorando la aparición de signos visibles de envejecimiento (como arrugas) y ayudando a prevenir el deterioro cognitivo.

Adicionalmente, las hojas de la vid, también conocidas como hojas de parra, se han utilizado tradicionalmente para:

• Desinfectar heridas. Las hojas de parra tienen propiedades antiinflamatorias y han sido tradicionalmente usadas para detener el sangrado en heridas superficiales.

• Tratar la diarrea. Las propiedades astringentes de las hojas de parra se han usado durante siglos para detener la diarrea.

La medicina herbal tradicional también ha hecho un buen uso de la planta de la vid; en Europa se emplea la savia de la parra de uva para tratar enfermedades de la piel y los ojos, en tanto que las hojas de parra son utilizadas para detener el sangrado, el dolor y la inflamación de las hemorroides.

Cómo funciona

Las uvas contienen una gran variedad de substancias antioxidantes, pectina, y taninos inmunoprotectores, que juegan un papel importante en la aglutinación de proteínas para proteger al cuerpo de agentes patógenos.

El resveratrol es un compuesto antioxidante que se encuentra en grandes cantidades en la piel de las uvas de color morado oscuro, y tiene un efecto protector sobre las funciones cerebrales, el corazón y el sistema inmunológico. Debido a sus probados efectos antienvejecimiento, el resveratrol es un ingrediente popular en los productos para el cuidado de la piel. Las antocianinas, por otro lado, son taninos que no solo dan a las uvas moradas su tonalidad oscura, sino que también protegen al cuerpo del daño de los radicales libres, ayudando a reducir la inflamación y previniendo enfermedades degenerativas.

Las uvas también contienen salicilatos, compuestos idénticos a los utilizados en la fabricación de la aspirina, a los cuales se atribuyen propiedades anticoagulantes y que podrían contribuir a reducir el riesgo de coágulos sanguíneos.

DIVERSOS ESTUDIOS HAN DEMOSTRADO QUE EL JUGO DE UVAS DE PIEL OSCURA PUEDE MEJORAR LA MEMORIA Y OTRAS FUNCIONES COGNITIVAS EN ADULTOS MAYORES.

Otras hierbas con propiedades cardioprotectoras son las aceitunas, el espino blanco y el sacha inchi, mientras que el arándano azul y el repollo también pueden proporcionar beneficios antioxidantes.

Efectos secundarios de la uva

El consumo directo de uva es considerado seguro, ya que se trata de una fruta prácticamente libre de efectos secundarios. Sin embargo, como en el caso de cualquier otra fruta, la ingesta excesiva puede causar malestar estomacal y nauseas. El extracto de semillas de uva, por otro lado, sí puede causar leves efectos secundarios en algunas personas, tales como dolor de cabeza y de garganta.

Precauciones e interacciones

Las alergias y otras condiciones de salud deben considerarse antes de establecer un régimen complementario, ya que los componentes activos de la uva, cuando se consumen en altas concentraciones, pueden interactuar con ciertos medicamentos, aumentando el riesgo de hemorragia. Las personas que van a someterse a procedimientos quirúrgicos, así como aquellas que consumen anticoagulantes, tales como aspirina, abciximab, enoxaparina, heparina, y warfarina, deben evitar el consumo de extracto de semilla de uva y suplementos de resveratrol.

Además del alto contenido de antioxidantes en la piel de las uvas moradas y rojas, todas las variedades de uva proporcionan buenas cantidades de vitamina K (filoquinona), que mejora la coagulación y promueve la salud de los huesos, así como cantidades adecuadas de vitaminas del complejo B, principalmente B₁ (tiamina), y B₆ (piridoxina).

El valor nutricional de las uvas está redondeado por pequeñas cantidades de minerales, principalmente cobre, potasio y hierro, así como de vitaminas, en particular C (ácido ascórbico), B₂ (rivoflavina) y B₃ (niacina).

Cabe mencionar que las uvas tienen un alto contenido de azúcar (alrededor de 16 gramos por taza), por lo que, aunque se trata de azúcares naturales que no elevan los niveles de glucosa en la sangre e incluso pueden reducir el riesgo de diabetes tipo 2, se recomienda consumirlas frescas y en cantidades moderadas.

100 GRAMOS DE UVAS PROPORCIONAN 67 CALORÍAS Y APROXIMADAMENTE 81 GRAMOS DE AGUA, ASÍ COMO EL 6% Y EL 4% DEL VALOR DIARIO DE CARBOHIDRATOS Y FIBRA DIETÉTICA, RESPECTIVAMENTE.

Aunque tienen otros usos, las uvas se han utilizado como alimento y bebida durante siglos, antes de la aparición de las modernas tecnologías de procesamiento. El consumo de estas frutas frescas o secas, en forma de pasas de uva, sigue siendo ampliamente popular. Sin embargo, también existen formas medicinales que permiten cosechar los beneficios de la uva.

En muchas recetas tradicionales de la cocina mediterránea y de Oriente Medio, las hojas de parra se suelen cocer al vapor, y se usan tanto en aperitivos como en platos de fondo.

Formas naturales

• Fresca. La uva fresca es una excelente fuente de vitaminas y minerales, muy popular como parte de una dieta saludable.

• Seca. Más conocidas como pasas, las uvas secadas al sol son uno de los bocadillos más antiguos y populares en todo el mundo.

• Jugo. Al igual que otras frutas jugosas, las uvas son perfectas para ser convertidas en bebidas refrescantes. Tomar jugo de uva fresco es una excelente manera de obtener los beneficios y propiedades de la uva.

• Polvo. Las cáscaras de uvas de color oscuro (moradas y rojas), ricas en antocianinas y resveratrol, se secan y se pulverizan para concentrar sus propiedades antioxidantes, y se pueden agregar a batidos y jugos.

Remedios herbales y suplementos

• Extracto líquido. El extracto de semillas de uva ayuda a aliviar la inflamación, así como a reducir los niveles de colesterol.

• Aceite. Obtenido del prensado en frío de las semillas, el aceite de uva está creciendo en demanda, a medida que se difunden sus beneficios para la salud.

• Cápsulas. El resveratrol contenido en las semillas de uva está ampliamente disponible como cápsulas y tabletas fáciles de tragar, para una dosis diaria de antioxidantes.

EL ACEITE DE UVA SE ESTÁ CONVIRTIENDO EN UNA OPCIÓN POPULAR PARA LOS ADEREZOS PARA ENSALADAS.

Los climas templados con estaciones marcadas (veranos cálidos e inviernos secos y fríos) son esenciales para el éxito del cultivo de la planta de la vid.

Instrucciones de cultivo

• Aunque la calidad del suelo no es tan importante para esta planta, la parra de uva prefiere suelos arenosos.

• La planta de la vid debe estar expuesta a temperaturas frías para estimular la floración en la siguiente estación.

• Algunas variedades de uva se pueden cultivar en regiones más cálidas si se suspende el riego después de cada cosecha, a fin de para "estresar" a la planta de la vid y estimular la floración sin necesidad de exposición al frío.

• La parra de uva requiere de al menos 20 pulgadas (500 mm) de lluvia por año y relativa protección contra el viento.

Taxonomía de la uva

También conocida como 'uva común', la planta de la vid (Vitis vinifera) es una enredadera leñosa perenne, que puede crecer hasta 115 pies (35 m) de largo en su ambiente natural, pero cuando se cultiva su crecimiento es controlado mediante podas anuales, pudiendo alcanzar de 3 a 10 pies (1-3 m). Las hojas de la parra de uva son delgadas, de forma circular a ovalada y de dos a nueve pulgadas (5-23 cm) de ancho, y las ramas soportan densos racimos de flores pequeñas, de color blanco verdoso a rojo. El fruto de la vid, conocido como uva, crece en grandes grupos y tiene forma redonda. Dependiendo de la variedad, su color puede ser verde, amarillo, rojo o morado oscuro.

• Clasificación

  La planta de la vid (Vitis vinifera) pertenece a la familia Vitidaceae, que abarca alrededor de 17 géneros y 1000 especies, la mayoría de ellas plantas trepadoras tropicales o subtropicales.

  El género Vitis contiene más de 60 especies distribuidas en todo el mundo, pero particularmente en América y Asia, y es el único en la familia Vitidaceae que produce frutos comestibles.

• Variedades y subespecies de uva

  El género Vitis incluye variedades de uva de gran importancia económica, como la uva de vino europea  (Vitis vinifera spp. Vinifera) y la parra brava (Vitis labrusca), nativa del este de Estados Unidos.

  Más de 572 variedades y 2275 cultivares de uva se han registrado oficialmente en el año 2017 solo en América del Norte. Sin embargo, la variedad dominante de uva de mesa (fresca) en los EE.UU., desde el siglo XIX, ha sido la 'Thompson Seedless', que también se utiliza para la producción de pasas de uva. Otras tipos de uva populares son 'Red Globe' y 'Emperor'.

Historia de la uva

Los primeros agricultores han cosechado uvas silvestres desde los tiempos del Neolítico, y los registros de almacenamiento de vino se remontan a la civilización sumeria (actual Irán), 7000 años atrás.

Los historiadores han ubicado el primer cultivo y distribución de la parra de uva entre 3500 y 3000 AEC, en el sur de Europa central. La práctica pronto llegó a la antigua Grecia, donde la uva se fermentaba y se bebía en celebraciones religiosas y sociales. A partir de ahí, la elaboración del vino se hizo popular entre los etruscos y, posteriormente, los romanos.

Las culturas de Oriente Medio también favorecieron el consumo de jugo de uva fermentada hasta el siglo VII AEC, cuando el Islam se convirtió en la religión dominante; sin embargo, el vino aún juega un papel clave en las ceremonias cristianas tradicionales. La colonización europea extendió su crecimiento aún más, y hoy en día, el cultivo y procesamiento de la uva contribuye de manera importante a todas las principales economías agrícolas.

Datos económicos

La uva ha sido un cultivo de gran importancia económica durante miles de años, y continúa alimentando a la industria vitivinícola en todo el mundo. En 2011 se cosecharon más de 69 millones de toneladas de uva en todo el mundo, y solo la producción de vino generó un valor estimado de 33 mil millones de dólares estadounidenses.

Francia, Italia y España lideran el mercado europeo, y Estados Unidos lo sigue de cerca, aunque también se beneficia de la popular industria de los jugos de frutas. Curiosamente, ya que no es una potencia vitivinícola, China produce la mayor cantidad de uva por año, con 9 millones de toneladas, a pesar de que su vínculo cultural con esta fruta más débil.

LA UVA HA PROBADO TAN IMPORTANTE EN LA AGRICULTURA QUE LA IMAGEN DE LA PLANTA DE LA VID APARECE EN LA PARTE POSTERIOR DE ALGUNAS MONEDAS CROATAS.

Otros usos

• Cuidado personal. Debido a sus propiedades antioxidantes y antienvejecimiento, el resveratrol que se extrae de la uva es utilizado en cremas y lociones para el cuidado de la piel.

• Enjuague bucal. El jugo de uva ha sido usado como enjuague bucal y blanqueador de dientes desde el siglo XVII.

• Enfriamiento de bebidas. Las uvas frescas a veces también se congelan y se usan como sustituto de los cubitos de hielo para enfriar el vino, sin peligro de derretirse y diluir su sabor y contenido alcohólico.