En los últimos años, se han realizado numerosos estudios para comprender mejor el papel de la microbiota intestinal en la salud humana, revelando sus vínculos con la absorción de nutrientes, la digestión, la inmunidad y la salud mental, entre otros.1 En consecuencia, influir en la composición de la microbiota tiene beneficios fisiológicos directos.
Una de las formas de hacerlo es con alimentos funcionales. Se ha demostrado que comer almendras con regularidad, por ejemplo, ofrece una amplia gama de beneficios para la salud, que incluyen ayudar a perder peso y regular los niveles de azúcar en la sangre.2
El propósito de este estudio fue determinar si el consumo de almendras puede alterar la composición de la microbiota fecal en adultos con obesidad y sobrepeso que tienen niveles elevados de glucosa en ayunas.
Estudio
Este ensayo clínico aleatorio de 2020 fue realizado por investigadores australianos, quienes publicaron sus resultados en la revista Nutrition Research.
Los participantes fueron 69 adultos con sobrepeso y obesidad (con un índice de masa corporal superior a 27 kg/m2), con una edad promedio de 60 años y con niveles elevados de glucosa plasmática en ayunas (entre ≥5,6 y <7,0 mmol/L). El estudio estaba programado para durar ocho semanas.
Los participantes fueron divididos en dos grupos: el grupo de intervención recibió dos raciones de almendras (56 g al día), mientras que el grupo de control recibió una galleta isocalórica rica en carbohidratos.
Los investigadores realizaron varias evaluaciones antes, durante y después del estudio para medir los resultados.
Resultados
Los participantes que consumieron almendras mostraron cambios significativos en la composición de su microbiota, así como aumentos en la riqueza, uniformidad y diversidad bacteriana. Estos cambios se relacionaron principalmente con una mayor abundancia de bacterias de la familia Ruminococcaceae.
El pH fecal y el contenido de humedad también disminuyeron en los participantes del grupo de almendras. No hubo cambios en los niveles fecales de ácidos grasos de cadena corta ni en la permeabilidad intestinal.
¿Qué quiere decir esto?
Este estudio proporciona evidencia sobre los efectos de comer almendras en la microbiota intestinal humana, particularmente en la abundancia y diversidad de especies de bacterias fecales, así como el pH y la humedad de las heces en adultos con exceso de peso y niveles altos de glucosa.
Se requieren más estudios para explorar los efectos prebióticos de las almendras con mayor profundidad y determinar sus aplicaciones medicinales, particularmente para personas con salud intestinal comprometida.
Otras hierbas que tienen efectos beneficiosos sobre la microbiota del cuerpo son el yacón, el puerro y el plátano, al igual que verduras fermentadas, como el repollo y el pepino.
Fuentes
- Nutrition Research, Almond consumption affects fecal microbiota composition, stool pH and stool moisture in overweight and obese adults with elevates fasting blood glucose: a randomized controlled trial, 2020
Notas a pie de página
- BMJ. (2018). Role of the gut microbiota in nutrition and health. Retrieved November 26, 2020 from https://www.bmj.com/content/361/bmj.k2179
- European Journal of Clinical Nutrition. (2013). Appetitive, dietary and health effects of almonds consumed with meals or as snacks: a randomized, controlled trial. Retrieved November 26, 2020 from https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC3898316/