No muchos postres pueden superar a un pan de zanahoria recién horneado, especialmente cuando está hecho con ingredientes súper saludables. Esta versión de un clásico de todos los tiempos esta hecha con quinua, rica en proteínas, y harina de trigo integral, lo que da como resultado una textura más densa y nutritiva. Los plátanos, las zanahorias y la leche de almendras hacen que este pan de quinua y zanahoria sea húmedo y tierno, en tanto que la canela, el jengibre y el jarabe de arce le dan un sabor y un aroma característicos.
- Precalentar el horno a 350°F (176°C).
- En un tazón grande, colocar la harina integral, la harina de quinua, el polvo para hornear, el bicarbonato de soda, la sal, la canela molida, el jengibre, las nueces y las frutas secas. combinar bien todos los ingredientes secos.(5 minutos)
- En una licuadora, procesar los plátanos, el jarabe de arce, el extracto de vainilla, la leche de almendras, el jugo de limón y el aceite de coco.(5 minutos)
- Agregar la mezcla húmeda a los ingredientes secos y mezclar. Añadir las zanahorias ralladas y la ralladura de limón y unir todo hasta lograr un mezcla homogenea.(5 minutos)
- Verter la preparación en un molde para pan ligeramente engrasado y hornear por unos 50 minutos, o hasta que al insertar un palillo en el medio, éste salga limpio.(50 minutos)
- Sacar del horno y dejar enfriar.
- Para un glaseado fácil, colocar ¼ de taza de azúcar glas en un tazón y agregar lentamente jugo de limón fresco. Integrar bien. Comenzar con una cucharada y agregar lo suficiente como para alcanzar la consistencia deseada. Verter esta mezcla sobre el pan de zanahoria ya frío y reservar para que se asiente. ¡Disfrutar!
Aunque los panes de zanahoria se acompañan generalmente con pasas o nueces, también se pueden agregar otros frutos secos, como aguaymanto, arándanos rojos, o nueces que se tengan a mano, como las avellanas.